iTampico (c) 2007

Nuestro corazón es un órgano muy importante, sino el más importante para el mantenimiento de la vida. Su función es la de bombear sangre para que circule por todo el cuerpo. Es una bomba de sangre que hace llegar a todas las partes del cuerpo el oxígeno y los nutrientes que necesitan.

Cuando el corazón late se produce una presión que hace que la sangre circule. Esta presión se llama presion arterial o tensión arterial. Cuando la presión arterial sube por encima de los niveles normales –entre 90 y 140 en adultos- se produce lo que se denomina hipertensión arterial, que es una enfermedad muy común en todo el mundo, llegando a afectar al 20 por ciento de las personas adultas.

Pero el mayor peligro de la hipertensión arterial es que no existen síntomas. Se puede tener hipertensión durante años sin saberlo, por esto es tan importante la prevención. Es fundamental realizar controles periódicos de la presión arterial, esta es la única forma de saber si padeces hipertensión.

La tensión arterial elevada es un enemigo silencioso que puede estar esperando para atacar sin que nosotros lo sepamos. La hipertensión puede afectar el funcionamiento del corazón, el cerebro y los riñones, además es un factor de riesgo cardiovascular y aumenta el riesgo de sufrir derrames cerebrales.

Aunque no se conocen exactamente las causas que originan la hipertensión, sí se han determinado algunos factores de riesgo que elevan mucho la posibilidad de padecerla: Consumo elevado de sal, alcohol, tabaco, falta de ejercicio físico y estrés son sólo algunos de los factores de riesgo.

Muchas personas con hipertensión han solucionado el problema simplemente bajando de peso. La obesidad es un factor de riesgo determinante y la práctica regular de ejercicio físico, sumado a una dieta equilibrada con muy poca sal, bebidas alcohólicas, grasas saturadas y muchas frutas y vegetales también es una excelente forma de eliminar la hipertensión arterial naturalmente.

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Qué es la hipertensión arterial