iTampico (c) 2007

En la época de la colonia, las grandes salinas impulsaron el progreso económico en la zona, favoreciendo el comercio marítimo. Por esta razón, los habitantes de Altamira vieron la necesidad de crear una aduana en el alto del antiguo Tampico, pidiendo un permiso al general Antonio López de Santa Anna y fue así como el 12 de abril de 1823 se fundó Tampico Moderno con el nombre de Santa Anna de Tampico , convirtiéndose esta ciudad en el principal puerto abastecimiento del noreste del país. De aquí se exportaba la plata acuñada en la casa de moneda de San Luis Potosí, favoreciendo también el comercio marítimo, ya que se importaban de Louisiana, ultramarinos, ropa y casas de madera prefabricadas, influenciándose así la arquitectura de nuestra ciudad.

El 24 de noviembre de 1825 se le concedió a Tampico su escudo de armas. En él aparece un indígena navegando en una canoa por el río, mismo que representa a los habitantes de la región. En la ribera aparecen dos perros de agua y cuatro palmeras representando la flora y fauna propia del lugar y en el eje del escudo, una estrella de plata de cinco puntas que representa la esperanza.

Tampico nació como población ya consumada la Independencia, pero tuvo el amago del extranjero durante todo el siglo XIX, primero con el intento de reconquista de México del Brigadier Isidro Barradas quien fue derrotado en esta ciudad el 11 de septiembre de 1829. En febrero de 1847 entraron a Tampico las tropas americanas sin que se opusiera ninguna resistencia por disposición del General Don Antonio López de Santa Anna. El 28 de marzo de 1861 las tropas al mando del Teniente Coronel José Hernández se sublevaron proponiendo a todos los mexicanos deponer sus diferencias y luchar contra los invasores españoles, franceses e ingleses de la triple alianza. A finales de 1862 el general francés Forey ordena el desembarco en Tampico de más de mil hombres bajo una promesa de pago, la entrada fue por el Fuerte Iturbide en el canal de La Cortadura, penetrando hasta la Plaza de La Libertad. El General Desiderio Pavón había evacuado el puerto, quedándose en los alrededores de la ciudad. Al no serle entregado lo prometido, Forey ordenó la desocupación (de enero de 1863). Tan solo unos meses después, el 10 de julio, el General Forey ordena ocupar de nuevo Tampico. Al saber de la caída de Tampico en manos de los franceses, Pedro J. Méndez se establece en Rancho Nuevo, entre Altamira y el mar y pone sitio a Tampico por ese lado, impidiendo el aprovisionamiento de víveres a los invasores.

Tampico, Nuestra Historia (Parte II)